La historia de Rusia durante el siglo XX ha sido objeto de enriquecedoras revisiones tras la caída del estalinismo. No sólo porque se abrieron archivos oficiales que permitieron conocer acontecimientos sociales y políticos, avatares institucionales y datos de capital importancia económica, sino también porque numerosos testigos directos de hechos, decisiones y conversaciones de alto interés perdieron el miedo --amén de las cadenas-- y aportaron referencias y detalles sustanciales.
Desde 1990, se han publicado nuevos textos sobre la revolución de octubre de 1917, sobre la planificación estatal, sobre Stalin y su entorno, sobre las condiciones de vida de las gentes o sobre las relaciones de la URSS con sus aliados y sus enemigos que han desmentido tópicos --tanto los de un lado como los del otro-- y han dado a conocer aspectos del régimen soviético y de la Rusia de siempre que ayudan a comprender lo que pasó, lo que ocurre y lo que puede venir.
El autor de este libro, Robert Service, ya había contribuido al conocimiento de Rusia con una biografía de Vladimir Illich Ulianov, Lenin, entre otros trabajos, y ahora con esta historia general de Rusia ofrece una visión de conjunto de la evolución del país a lo largo de un siglo en el que el antiguo imperio de zarista --que conservó su acervo medieval hasta el último momento-- se convirtió, primero, en un laboratorio de ideas y después, en un Estado absurdo.
De Lenin y de Stalin ya se había estudiado y escrito mucho --incluidos demasiados textos hagiográficos y satanizadores--, por lo que quizá las aportaciones más interesantes de Historia de Rusia en el siglo XX son las referidas a la etapa que va desde Jrushchov hasta Putin.
Service ofrece claves que ayudan a entender el fracaso de la Perestroika que pilotaba Gorvachov y el triunfo del ex estalinista y maestro del oportunismo que fue Yeltsin.
Edita CRÍTICA
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